miércoles, 15 de abril de 2009

Unas décimas

Unas décimas que se me han colado con este cambio de tiempo hacen que me queden en casa un rato, que no salga a mi copa entresemanal y que no me sumerja en las cloradas aguas a hacer mis largos. Tampoco está mal quedarse en casa y hacer cosas pendientes.
La Santa Semana estuvo como esperaba: marmota y salidas a muerte, y eso se paga, uf. También he revivido momentos mágicos con amigos que se quedan por aquí también y nos ponemos al día.
Hay un maravilloso artículo en El Pais Semanal de hace dos domingos sobre la amistad. Qué maravilla de contenido; los que entendemos bien el concepto de ser amigo, y de dar amistad, no sólo recibir, nos reflejamos perfectamente en esas líneas magníficamente escritas. Qué bonito es hacer un camino juntos. Uno, que pasa de amores, etc... tiene, además de una familia estupenda, varios amigos buenos. También " conocidos " y " saludados ", pero amigos, también. Un día desgranaré aquí a cada uno de ellos, que son estupend@s, pero uno siempre tiene un amigo del alma, yo no iba a ser menos; Cristina lo es, mi amiga del alma. Esa amiga. Ella. Y los que nos rodean lo saben.
Cris y yo a veces hablamos de los amigos que se han quedado en el camino, que en realidad no fueron amigos, de las traiciones y lealtades, de la extraordinaria gente que hemos tenido la suerte de conocer, y de algún o alguna miserable que se nos ha cruzado en la vida. Y, con el pasar de los años, el concepto de la amistad va llevando a una especie de simbiosis familia/amigo que no está nada mal y en el que merece la pena pararse a reflexionar un rato.
El fundador de los Legionarios de Cristo era un cerdo; vamos, lo dice la prensa, que le gustaban los menores muy menores, y tenía hijos extramatrimoniales. Luego, cara a la galería, castidad y por ahí. Imagino que a algunos de los legionarios les dará vergüenza... ¿ o seguirán negando la evidencia? ¿Seguirán negando también la evidencia Trillo, el general Navarro y toda esa calaña, ahora que han venido los forenses turcos a Madrid a contar que fueron los militares españoles los que se negaron a la identificación de los cadáveres porque tenían que volver a España a un funeral? Gracias a Dios, el juez Bermúdez ha admitido que estos forenses declaren, no le quedaba otra. Por cierto, hay que ver qué discreto y modoso está el juez, nada que ver con la super star mediática del 11-M... después del libro de su mujer, es lo mejor que puede hacer.
Preparando mi próximo viaje, y celebrando que hace 4 años me operaron y que estoy aquí contándolo.
Pepiño Blanco y Espe se han hecho intis, se presenta una primavera entretenida, y yo con estos pelos y estas barbas.

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