jueves, 18 de marzo de 2010

Que no se hable de Dios

El obispo Antonio Cañizares ha hablado, por primera vez, de la pederastia clerical descubierta en Alemania; estaba yo preparándome una cenita, y oigo la noticia en el telediario; a ver qué cuenta, me dije, ¿pedirá perdón como Ratzinger en EEUU?, ¿qué tipo de disculpa o comentario hará al respecto, cuando no hemos oído ni pío a la Iglesia española sobre los tormentos sufridos por los niños a manos de algunos curas o sacerdotes? Pues... agarraos: " Se habla de este tema... para no hablar de Dios".
Imagino que la cara de pasmado que se me quedó me impidió oir más... pero me consta que lo volvió a repetir, sí, seguro, que la gente ahora saca este tema para no hablar de Dios... esto se acerca a la blasfemia... disculpe, monseñor, no meta usted a Dios en esto, porque esas cosas son más bien del maligno. Que cada palo aguante su vela, que cada Iglesia asuma sus responsabilidades, y que se modifiquen las leyes penales para que los delitos de pederastia no prescriban nunca. Al Dios de los cristianos, a Yahvé, a Alá, a Buda, a Xapanah, a Oshun y a todos los dioses del universo, les repugnará que se les use como excusa en esta cosa tan sucia y rastrera que es la pederastia. Mejor hablar de suprimir el voto de castidad en la Iglesia Católica, mira tú que no se oye nada de abusos sexuales a menores por parte de curas y sacerdotes protestantes... a ver si va a ser eso... en cualquier caso, creo que a Dios no le importará nada.